jueves, 15 de octubre de 2009

La Batalla por los sueños II

... y sus armas comenzaron a entre mezclarse, no las distinguía. Entró en un estado de colpaso, de incapacidad, de inacción, de dolor del alma. Confundió sus capacidades de soñar con las de reprimirse, por pecar del simple error de ser distinto a los demás. Su voluntad se corrompió, cuando no se permitió ser. Cuando guardó en el archivo de sus recuerdos lo que alguna vez soñó conquistar, domar o volar. Pero el sueño fue mas fuerte, y terminó con todo el enemigo cuando parecía que este, iba a conquistar el perímetro de su cuerpo. De rodillas y amagando con levantarse, clavo la bandera de conquista en medio de su frente, y volando se fué a soñar de vuelta. A soñar con volver a ganar la batalla...